En el Día Internacional de la Mujer Proletaria, 8
de marzo, animamos a bregar por organizarse y emanciparse de la opresión que el
actual sistema capitalista ejerce sobre ellas. Opresión que en nuestro país es
reforzada por nuestra condición de país semifeudal y semicolonial donde se
erige un capitalismo burocrático, donde el machismo y la religión cumplen
también un papel de opresión sobre la mujer. Por eso la emancipación de la
mujer está íntimamente ligada en su grado de participación en la lucha por
destruir este viejo orden y construir uno nuevo donde no existan pobres ni
ricos, una sociedad de la eterna armonía. Lucha que está ligada a la
emancipación del proletariado como ultima clase social.
Partimos de la tesis de Mariátegui que enseña: "las
mujeres como los hombres son reaccionarias, centristas o revolucionarias, no
pueden, por consiguiente, combatir juntas la misma batalla. En el actual
panorama humano la clase diferencia a los individuos más que el sexo".
Esto es como punto de partida para entender el problema de la emancipación de
la mujer de forma científica y no verlo como problema de género (sexo) que está
muy de moda ahora, ocultando así la esencia misma de la opresión de la mujer,
echando tierra a sus ojos para emanciparse.
En la época contemporánea, en el capitalismo, en
fase imperialista, la realidad de la mujer no ha cambiado más que en el aspecto
formal de la ley. Se reconoce muchos derechos en el papel pero en los hechos es
como si no existiera nada… en el mundo a diario mueren mujeres, su opresión es
peor que en épocas del esclavismo, la trata de blancas, prostitución y ahora el
muy formalizado delito de feminicidio que solo es un saludo a la bandera ya que
se registran estadísticas y estadísticas pero casi nadie es castigado. Entonces
como se ve el problema de la mujer no se debe a más leyes sino a problemas
económicos sociales, que reproducen el machismo de una y mil formas y donde la
religión juega un papel de sostenedor de este podrido orden machista y viejo
estado burocrático – terrateniente.
La
mujer al igual que el varón es explotado y eso deben entenderlo, su lucha es
común y por ende los enemigos son comunes para ambos. A desencadenar la furia de la mujer.
En nuestro país saludamos a la mujer que combate al
lado del pueblo y por ende este saludo no va aquellas mujeres que buscan
oprimir al pueblo como la congresista de la bancada de fuerza popular Rosa
Bartra que ha presentado un proyecto ley de “esclavitud juvenil” y que ha
suscitado ya tres marchas para que dicho proyecto de ley sea ARCHIVADO. Dentro
de esta lucha destacar el papel que la mujer viene teniendo en la defensa de
sus derechos. Ahí vemos en esencia el arrojo que tienen las jóvenes mujeres que
dan todo de sí para ARCHIVAR esta ley de esclavitud laboral.
La mujer tiene que entender la realidad que vive y
empezar organizarse problema que está ligado a su politización, la politización
de la mujer es el problema clave de su emancipación. Sin ello no habrá nada
para la mujer. Debe estar guiado su politización por la invicta ideología del
proletariado, que ya ha dado grandes muestras de cuanto avanzo la mujer en su
lucha por su emancipación que hoy ha sucedido un derrota temporal, pero con
vistas a conquistar los cielos y ponerlos a los pies de cada ser humano, pero
esta vez de forma definitiva.
¡Honor
y Gloria Eterna a las más grandes heroínas del Proletariado!
¡La
rebelión se justifica!
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