¡Proletarios de todos los países, uníos!
FRACASO DE LAS ELECCIONES REACCIONARIAS Y EL PAPEL DE LA LOD (MOVADEF) Y DE LAS ACCIONES DE LOS “SEÑORES FEUDALES DE LA GUERRA” DEL VRAEM
“Destruir el capitalismo burocrático, tanto particular como estatal; confiscar todas sus propiedades, bienes y derechos económicos en beneficio del nuevo estado, igualmente que los correspondientes al imperialismo”.
(I Congreso del PCP, Programa General de la Revolución Democrática)
La facción de la burguesía burocrática en la segunda vuelta de las elecciones generales para recambio de autoridades reaccionarias del viejo Estado terrateniente-burocrático al servicio del imperialismo, principalmente yanqui, como consecuencia del estrepitoso fracaso que ha cosechado este proceso electoral reaccionario 2021, por esas trampas farsescas de la propia farsa que son las elecciones reaccionarias, estará representada por el candidato del partiducho “Perú Libre”, Castillo.
Castillo de “Perú Libre”, siglas electorales de propiedad del corrupto ex-gobernador de Junin, no es ningún triunfador de la primera vuelta, sino quien quedó en primer lugar de todos los derrotados, es decir de las 18 agrupaciones o siglas electorales con sus candidatos que solo consiguieron el rechazo de los convocados a elegirlos. El “rondero” contrarrevolucionario Castillo, ocupó el primer lugar en la primera vuelta del 11 de abril con tan sólo el 11,04 % de los votos de los ciudadanos considerados aptos para votar en estas elecciones generales reaccionarias según la Oficina de Procesos Electorales del Perú (ONPE). Es decir, casi el 89 % de los inscritos o no votó o votó en contra de quien ocupó el primer lugar, esto es la inmensa mayoría de los llamados a elegirlo para “legitimarlo” como futuro presidente, en caso de resultar designado mediante el fraude electoral, rechazó a Castillo. Es decir, llegado el caso, ni con fraude puede llegar a fungir como presidente “legitimado por la mayoría del voto ciudadano en elecciones libres”. El caso es más desatrozo aún, para la que quedó en segundo lugar y será su contendiente en la segunda vuelta del próximo 6 de junio, como representante de la facción compradora de la gran burguesía, la Keiko Fujimori de Fuerza Popular solo obtuvo oficialmente el 7.72% del total electoral, es decir más del 92% de los llamados a “elegir” la rechazó.
Ambos candidatos, tanto Castillo como la Fujimori, son producto del fracaso reaccionario de la primera vuelta de las elecciones reaccionarias de 2021, que confirmaron lo que la reacción tanto temía y con ello el fracaso de “legitimar” a las nuevas autoridades reaccionarias, esto es, “en último término” con “un desdén de la ciudadanía hacia la clase política del país. Es decir, una absoluta ausencia de esperanza en lo que los líderes de los partidos que la albergan puedan ofrecer a los peruanos en estos comicios, con prescindencia de su procedencia ideológica o las convicciones que afirmen encarnar”. Rechazo espontáneo expresado así a todo ese viejo Estado, sus partidos, personalidades, instituciones, etc. Casi un 42% del censo electoral o no fue a votar o voto en blanco o viciado y el resto que votó por algún “partido”· o candidato lo hizo mayoritariamente en contra de los dos candidatos que han pasado a segunda vuelta establecida para “torcer la mano al electorado” (en palabras de un comentarista político reaccionario).
El archioportunista “rondero” Castillo”, fue convertido como resultado de ese fracaso reaccionario, por arte de birlibirloque en el “mascarón de proa” de la facción burocrática de la gran burguesía y cabeza de los oportunistas y revisionistas del más diverso pelaje. Castillo fue miembro de las “rondas campesinas”, organización contrarrevolucionaria al servicio de la guerra de baja intensidad que dirige el imperialismo yanqui contra la guerra popular. Estas rondas son fuerza auxiliar de las fuerzas armadas genocidas en la guerra contrarrevolucionaria. Castillo, luego, como representante del campesino conservador y contrarrevolucionario por más de dos décadas perteneció al partiducho del “yanqui con chullo” Toledo, al que abandonó. Luego, en contubernio con la ratas de la línea oportunista de derecha, revisionista y capitulacionista (LOD) se trepó a la presidencia del Comité Nacional de Lucha de la Huelga Nacional Indefinida del Sutep de 2017 (HNI-2017), contra la oposición consecuente de las bases y dirigentes de los maestros clasistas. HNI-2017 a la cual traicionó en servicio a la patronal (Ministerio de Educación). Este oportunista luego de traicionar la HNI y vender el pliego de reclamos a la parronal con la ayuda de la misma y de las ratas de la LOD con influencia en algunos sectores de los maestros, constituyó la famosa federación (Fundep) oportunista y divisionista para oponerse a la reconstitución del Sutep Clasista desde las bases.
Tras el oportunista Castillo, representante de la burocrática, están otros oportunistas tan desvergozados como él, es decir los del Frente Amplio, los de “Nuevo Perú” y otros de los más variados colores y pelambre, pero todos ellos alineados tras la tarea reaccionaria de la reestructuración del viejo Estado terrateniente burocrático para “superar la crisis generalizada”, salvadores del hundimiento estatal a través de su cacareada “asamblea constituyente” y “nueva constitución”. ¿En que beneficiaría al pueblo y a la nación? Obviamente en nada, o, ¿alguna vez, con la aplicación de estas “famosas propuestas democráticas” el proletariado, el campesinado principalmente pobre y el pueblo en general han obtenido beneficios? Todos estos y revisionistas están por impulsar esta tarea reaccionaria de la reestructuración estatal para aplastar más al pueblo y buscar aniquilar la guerra popular. De las elecciones reaccionarias no puede venir nada bueno para el pueblo, todo lo bueno para el pueblo solo puede provenir de la guerra popular.
Detrás de todos los oportunistas y revisionistas, practicantes del cretinismo parlamentario, prosiguiendo su camino de servicio a los planes de la reacción, se han colocado también en fila india los capituladores de la línea oportunista de derecha (lod revisionista) con su engendro Movadef y Fundep y también están buscando su lugar en estas justas reaccionarias, aunque a su modo y según su propia dinámica, los del Vraem de la línea oportunista seguidores del renegado y mercenario “José” y compañía, estos últimos están buscando su alistamiento hace tiempo a través de negociaciones con voceros llamados “reservistas” agentes del ejército y la Dircote ( como el tal “Sacha”) en aras de una supuesta “reconciliación nacional”. Estos traidores y renegados del mercenario “José”, como “señores feudales de la guerra” se están haciéndose presente en estas elecciones con algunas “acciones”, buscan obtener gran resonancia para colocarse mejor en vista a los resultados de las elecciones; para conseguir mejores condiciones de “negociación” y conservar su miserable existencia como “señores feudales de la guerra”.
Estas elecciones muestras el mayor hundimiento del viejo Estado y la vieja sociedad, que está cada vez más maduros para ser barridos por la guerra popular. Su camino burocrático se desarrolla en medio de mayor pugna reaccionaria, que como tenía que ser, cuenta con la participación del oportunismo y el revisionismo. Por eso decimos, esta elecciones generales reaccionarias de 2021 como tenía que ser, se han presentado y desenvuelven como defensa del caduco orden existente y evolución de la sociedad peruana; y ellas expresan una mayor colusión y pugna reaccionaria entre las dos facciones de la gran burguesía y entre los grupos que conforman cada una de ellas. Estas agudas contradicciones tienen también que enmarcarse en el plan reaccionario del “Bicentenario” y la continuación de la aplicación de las tres tareas contrarrevolucionarias que necesitan desenvolver y que en esencia no ha variado (reimpulsar el capitalismo burocrático, reestructurar el viejo Estado y buscar aniquilar la guerra popular, en concreto buscando conjurar la culminación exitosa de la reorganización general del Partido Comunista del Perú (RGP), en y para la guerra popular en lucha a muerte contra las ratas revisionistas y capitulacionistas de las “llamadas cartas de paz” (léase Modavef) o la encabezada por el renegador traidor y mercenario “José” del Vraem ) una vez más decimos; sigan soñando, porque su realización es un imposible histórico y político.
El imperialismo principalmente yanqui apunta a un nuevo plan (2021 – 2036) a través de nuevo gobierno reaccionario “elegido”, si no es así, será por el golpe de estado que siempre está rondando, pero sea quien sea el que encabece el nuevo gobierno reaccionario, este nuevo gobierno será más hambreador, más genocida y más vendepatria pro yanqui que todos los anteriores, utilizará el “bicentenario” moviendo patriotería, “reconciliación nacional”, “todas las sangres” y hasta “nueva constitución”, tener en cuenta que para este viejo y podrido Estado terrateniente burocrático, es importantísimo darle legitimidad al régimen y “legitimidad “es un componente esencial de su estrategia contrasubversiva de guerra de baja intensidad (GBI) y ese es el fracaso que han cosechado. “Legitimidad” del nuevo gobierno para su GBI aplicando cada vez más, mayor represión de la justa y creciente protesta popular.
Fracaso de la farsa electoral de 2021, en unas elecciones consideradas cruciales para la reacción, por lo cual, para concluir, citamos al Presidente Gonzalo en su discurso sobre el 10º aniversario de la guerra popular:
“Como
concluyera la reciente Sesión del Comité Central, celebratoria del
triunfante X ANIVERSARIO DE LA GUERRA POPULAR, la reacción peruana y su
amo, el imperialismo yanqui principalmente, necesitan reimpulsar el
capitalismo burocrático, volver a reestructurar el Estado y aniquilar la
guerra popular. Estas son sus necesidades y sus sueños porque el
capitalismo burocrático registra su más profunda crisis económica hasta
hoy, hundiendo a toda la vieja sociedad peruana en su más grave crisis
general; en tanto que su Estado, la caduca dictadura de grandes
burgueses y terratenientes, reestructurada por tercera vez en este
siglo, el año 78, como tenía que ser, sigue siendo una podrida
maquinaria burocrático-militar más opresora y sangrienta cuanto más
impotente se presenta ante el desarrollo de la lucha popular; y porque
la guerra popular, en estos diez años victoriosos, sustentada en las
masas principalmente del campesinado pobre y bajo la dirección del
Partido, ha llegado a concretar la estremecedora perspectiva real de
conquistar el poder en todo el país para el proletariado y el pueblo.
Necesidades, planes y afanes reaccionarios e imperialistas que
inevitablemente potenciarán más aún la lucha de clases, desarrollando la
lucha de masas y elevando la guerra popular a su mayor expresión”.
Movimiento Popular Perú
Mayo 2021
Especial para el periódico internet ci-ic.org
